¿Sabías que la falta de ergonomía en el puesto de trabajo es la causa principal de las bajas laborales? Este problema se manifiesta principalmente en la espalda, el cuello y los hombros debido a malas posturas y largas horas frente al ordenador.
El 36,5% de los trabajadores estuvo de baja en los nueve primeros meses de 2023, una cifra que supera las registradas antes de la pandemia.
Y es que la mayoría de bajas laborales que se solicitaron este año pasado fueron por problemas derivados del aparato musculoesquelético: lumbalgia, tendinitis, esguinces o artrosis son algunos de los diagnósticos más repetidos en los 7,75 millones de partes que se tramitaron entre enero y septiembre.
Aparte del envejecimiento de la población, en la mayoría de los casos, se tratan de enfermedades causadas en el trabajo.
Causas de la falta de ergonomía en el trabajo:
- Diseño inadecuado del espacio de trabajo: muchos lugares de trabajo no consideran adecuadamente la disposición de los elementos, desde la disposición de escritorios hasta la altura de las sillas, lo que lleva a posturas incómodas y tensiones físicas.
- Falta de equipamiento ergonómico: la carencia de herramientas y mobiliario diseñados ergonómicamente contribuye a la fatiga muscular, lesiones por esfuerzo repetitivo y, en última instancia, afecta la productividad y la salud general de los empleados.
- Jornadas laborales prolongadas sin descanso: la cultura laboral que fomenta jornadas maratonianas sin pausas adecuadas contribuye a la fatiga física y mental, afectando directamente la postura y la salud musculoesquelética.
Consecuencias de la falta de ergonomía:
- Lesiones musculoesqueléticas: dolores de espalda, cuello y muñecas son comunes entre aquellos cuyos entornos de trabajo no están diseñados para apoyar la postura natural del cuerpo.
- Disminución de la productividad: la incomodidad constante resultante de una configuración ergonómica deficiente puede afectar la concentración y la eficiencia, llevando a una disminución en la productividad.
- Aumento de las bajas laborales: las lesiones derivadas de una mala ergonomía pueden llevar a bajas laborales prolongadas, generando costos significativos para las empresas y afectando la moral del equipo.
Soluciones prácticas:
- Diseño ergonómico del espacio de trabajo: invertir en mobiliario y equipos diseñados ergonómicamente puede marcar una gran diferencia. Sillas ajustables, escritorios y teclados ergonómicos pueden mitigar problemas posturales.
- Fomentar pausas y ejercicio: complementar políticas que promuevan pausas cortas y actividades físicas dentro del horario laboral puede reducir la fatiga y mejorar la salud general.
- Educación sobre postura: proporcionar capacitación a los empleados sobre la importancia de mantener una buena postura y cómo ajustar su entorno de trabajo puede ser clave para prevenir lesiones.
- Trabajar de pie: durante un tiempo de la jornada es algo que cada vez se contempla más. Alternar esta postura con el trabajo sedentario reduciría los problemas de salud del trabajador a la mitad.
Abordar la falta de ergonomía en el trabajo no solo es esencial para el bienestar de los empleados, sino también para la productividad y la salud financiera de las empresas. Al priorizar el diseño ergonómico, fomentar hábitos saludables y educar a los empleados, podemos crear entornos laborales que promuevan la salud y el rendimiento óptimo.
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